jueves, 25 de noviembre de 2010

Hay actitudes que cambian para ser las mismas


Muchas veces se ha comparado la lucha por los derechos civiles de los homosexuales con la lucha por los derechos civiles de las minorías raciales como el de los negros en los Estados Unidos. Hay paralelismos y diferencias que es bueno tener en cuenta. Más que nada lo que interesa en esta imagen gráfica de un chiste estadounidense que me parece que no seria conveniente traducir al español porque no es de un ingles demasiado difícil es que los mismos argumentos, y tambien las mismas personas, son utilizados para impedir cualquier avance en el tema de los derechos civiles. Utilizar los temores y los prejuicios de la gente en relación a todo lo que supone cambiar los esquemas al uso por injustos y discriminatorios que estos sean es algo con los que nos vamos a tener que enfrentar muy a menudo. Aplicando el tema que nos ocupa con la herramienta de trabajo de la que nos hemos dotado podemos argumentar sobre el "juego del lenguaje" que supone considerar el matrimonio como algo sagrado. Si nos damos cuenta estamos usando la misma palabra para definir una realidad que no tiene el mismo significado en las dos partes que aparentemente estan enfrentadas. El matrimonio civil y el matrimonio canónico son dos cosas distintas porque así esta fijado desde hace bastante tiempo por nuestra legislación. Un matrimonio canónico puede tener si se pretende que tenga efectos civiles pero no es estrictamente necesario, acordaos del tema de las personas mayores viudas que se casaban solo por la Iglesia para no perder la pensión hace algunos años hasta que la ley se cambio en este sentido. El matrimonio civil no ha de tener una consideración religiosa y ademas existen matrimonios religiosos admisibles a efectos civiles que no son de la Iglesia que muchos todavía ven como la Oficial de este pais. Esta claro que no se ha pretendido por parte de los que lo han promovido o contraído que el matrimonio entre dos personas del mismo sexo tenga que ser considerado como un acto religioso. Lo que ha pasado tiene mucho que ver con los "juegos del lenguaje" sociales que manejamos.

No hay comentarios: