Aplicación practica



La expresión: “Juego del Lenguaje” que hemos tomado de la filosofía lo vamos a usar en nuestra dinámica para poner de relieve que el hablar forma parte de una actividad o de una forma de vida. Lo que proponemos es utilizar las palabras y   sus sinónimos para encontrar la salida de los dilemas que las propias palabras nos causan. Como ya sabemos el lenguaje depende de muchos aspectos extralingüísticos, que son inherentes a la naturaleza humana. Por ejemplo, no podemos entender el  “juego del lenguaje” de contar un chiste si no tenemos sentido del humor o si somos ignorantes por completo de la forma de vida del grupo del que se hace el chiste. Uno de los ejemplos que nos da Wittgenstein en “Investigaciones filosóficas” es que si examinamos el lenguaje con que nos referimos a la muerte, si la muerte de una persona nos importara tanto como la muerte de una mosca, no comprenderíamos los rituales y el lenguaje del duelo. Es por este motivo que cuando estudiamos las manifestaciones del duelo de culturas desaparecidas como puede ser la Antigua Egipcia; a pesar de lo distinta que es a la nuestra somos capaces de entender algo de lo que expresan las manifestaciones que observamos a través de las imágenes que nos han dejado. 
Las palabras y su significado no son independientes de la actividad que hacemos cuando las utilizamos, es la actividad a través de los juegos del lenguaje lo que da un significado a las palabras que se usan y es por eso que en lingüística son tan importantes los diccionarios de uso de una lengua para poder comprender que significaba la palabra usada por gente y épocas diversas. Este tipo de material aunque no de de forma exclusiva es el que vamos a utilizar cuando llevemos a la practica la dinámica que proponemos. Las palabras que usamos están en intima relación con lo que hacemos cuando las usamos, funcionan de forma parecida a  la analogía que usa Wittgenstein sobre la botella atrapamoscas en donde la mosca ha de encontrar la salida haciendo uso  de las paredes de vidrio que confunden al insecto. Las palabras forman los bordes de la “botella” con la cual tropezamos pero también nos pueden servir para encontrar “la Salida de la Botella” si hacemos uso de forma correcta de los mecanismos que nos proporciona la filosofía del análisis del lenguaje. Otra de las analogías descritas por Wittgenstein en  su libro y que vamos a usar en nuestro trabajo con las palabras es el de las figuras de ajedrez. En el lenguaje las palabras  se establecen según unas reglas. La pregunta ¿Qué significa una palabra? es análoga a ¿Qué significa una figura de ajedrez? porque ambas presuponen para su respuesta un sistema convencional de reglas. Hacemos notar que los juegos como el ajedrez asumen distintos niveles de significado en relación de el tipo de juego: amateur, profesional, lúdico, competitivo..... que estemos usando. Estas reglas no pueden ser privadas porque el seguimiento de una regla una única vez es imposible. La expresión de los sucesos individuales internos como por ejemplo el dolor carecen de significado si no sirven para comunicar algo a los demás y la usaremos en nuestra dinámica haciendo que se note que cuando se usa una palabra lo que importa es la reacción que cuando la oyen cuando se utiliza tiene la gente que participa de ese uso. Una sensación estrictamente privada no puede formar parte de un “Juego del Lenguaje”. De la misma forma que resultaría paradójico un actor que interpretara el papel de reprimir completamente sus sentimientos pues no tiene sentido el uso de una palabra que solo me sirva para identificarme a mi mismo sin relación a los demás. Así las palabras que estamos utilizando para denominarnos como colectivo son significativas en relación al uso que se hace de ellas en un contexto social.



Para poder compartir los significados el lenguaje trabaja ampliamente con analogías similitudes o aires de familia. Por lo  tanto la pregunta ¿Cual es la esencia de tal o cual palabra? se disuelve por arte de magia en medio de los aires de familia  de los “Juegos del Lenguaje” y la pregunta que nosotros nos hacíamos sobre la esencia y el significado autentico de una palabra utilizada para denominar a personas en un contexto LGBT se disolverá por arte de magia en medio de los aires de familia del “Juego del Lenguaje” especifico de los colectivos que reivindican la visibilidad de las personas que forman los colectivos LGBT.